El principal objetivo de este viaje fue visitar Dinamarca,
paÃs donde nunca habÃamos estado anteriormente. Al planearlo fue evidente
que tendrÃamos que pasar algunos dÃas en Copenhague, pero fue difÃcil
decidir que otros lugares del paÃs valÃa la pena visitar. Finalmente,
teniendo en cuenta los pocos dÃas que tenÃamos y el hecho de que llegábamos
y salÃamos del aeropuerto de Copenhague decidimos concentrarnos en las
islas, dejando la parte parte continental (Jutlandia) para un futuro viaje.
Fuimos directamente a la principal atracción de la ciudad,
La Sirenita ,
que a pesar de no ser especialmente impresionante es un icono de Dinamarca y
por lo tanto se supone que debe ser visitada. Dejamos el coche en cerca de
La Sirenita y fuimos andando hacia el cercano centro de la ciudad, pasando
por la realmente bonita Iglesia de Saint Albans
y el parque de Churchill, hasta la impresionante Iglesia de Marmol
y el
Palacio de Amalienborg .
Desde ahà seguimos hacia el Castillo de Rosenborg ,
que está rodeado de un hermoso parque, y luego hacia el jardÃn Botánico,
que es absolutamente esplendido y tiene un inmenso invernadero que vale la
pena visitar.
El dÃa siguiente, Lunes, era el dÃa de las compras, asà que pasamos toda
la mañana arriba y abajo por la Strøget, comprando algo de ámbar (bastante
caro, por cierto) y otros recuerdos. Por la tarde fuimos a los famosos
jardines del TÃvoli ,
un parque de atracciones en el centro de Copenhague, que a pesar de su
reducido tamaño (unos 75.000 metros cuadrados) te atrapa durante muchas
horas. El TÃvoli es especialmente bonito por la noche, cuando está iluminado
por miles de luces de colores, asà que es una buena idea ir por la tarde y
quedarse hasta la noche, cenando en cualquiera de los múltiples
restaurantes, que cubren todos los gustos y bolsillos.
Al dÃa siguiente tocaba trasladarnos a nuestro nuevo destino en la isla
de Lollandia, pero en vez de ir directamente (la distancia es realmente
poca) nos paramos en Roskilde ,
que tiene una bonita catedral, agradables calles comerciales peatonales, y
un famoso museo de barcos Vikingos. Luego pasamos por Næstved ,
donde comimos, y a continuación fuimos al agradable Palacio de Gavnø ,
que ocupa su propia isla y que solo pudimos ver por fuera (¿adivinas el
motivo?....siiiii, cerraba a las 17:00 !!)
Justo antes del atardecer llegamos a Maribo, la población mas
importante de la
isla de Lollandia, y fuimos al Hotel Maribo Søpark ,
donde habÃa reservado una habitación. Los problema empezaron cuando la
recepcionista me dijo que no habÃa habitaciones de fumador disponibles, y a
pesar de que insistà en que habÃa reservado una habitación de fumador no me
quedó mas remedio que coger una de no fumador, lo que ciertamente exasperó a
mi esposa (la fumadora...). Eso si, la chica de la recepción fue lo
suficientemente amable como para proporcionaros un cenicero y autorizarnos a
fumar en el balcón de la habitación (no hace falta decir lo "agradable" que
es fumar en el exterior, en otoño, en Dinamarca, por la noche...)
Respecto a la habitación y el baño, bueno.....debÃan estar bien en los años
80, pero poco se habÃa renovado desde entonces.... La piel de las sillas
estaba cuarteada, las sabanas estaban rasgadas, la cortina de la vieja
bañera estaba sucia, el balcón no habÃa sido barrido en años y estaba lleno
de arañas,.... La única cosa buena de este hotel es su situación,
justo en la orilla del
lago Søndersø, con bonitas vistas y en un lugar apacible. Digamos que es
el hotel equivocado en el lugar adecuado, y no es precisamente barato.
Al dÃa siguiente nos dirigimos al este de la isla de Møn,
donde está Møns Klint. Si te gusta la naturaleza y los paisajes te
recomiendo encarecidamente que visites Møns Klint ,
un lugar muy conocido con unos brillantes acantilados de yeso de mas de 100
m de altura, en cuya parte superior hay un hermoso bosque que invita a
pasear por sus bien conservados (aunque bastante empinados) senderos que
recorren la costa a lo largo de varios km.
Nuestro viaje estaba llegando a su fin, pero todavÃa nos quedaba un dÃa
para visitar la encantadora ciudad de Ribe ,
en el continente, conocida por ser la ciudad mas antigua de Dinamarca y por
tener mas de 100 casas tradicionales en excelente estado de conservación.
Disfrute mucho de pasar el dÃa en Ribe caminando arriaba y abajo por
sus calles peatonales.
Por la tarde empezó a llover muy fuerte, asà que nos retiramos temprano
al hotel y descansamos un poco en nuestra ultima noche en Dinamarca. A la
mañana siguiente cruzamos la isla de Fionia en dirección este,
parando de nuevo en Odense
para comprar algunos recuerdos de ultima hora, luego cruzamos el puente de
18 Km. que une Fionia y Zelandia y nos dirigimos directamente
al aeropuerto de Copenhague.
Las bebidas alcohólicas son MUY caras. No hay vinos Daneses
(demasiado al norte para las vides), pero afortunadamente hay muchos tipos
de buena cerveza (muy cara, pero buena).
Haz clic en los enlaces del siguiente
mapa para ver algunas fotos de la zona en mi álbum de fotos.